Dídac Vilà pone todo para poder jugar en el Valencia

El fichaje de Dídac Vilà por el Valencia está en manos del club. El jugador hace el esfuerzo económico que sea necesario, porque la llamada de los de Mestalla no se puede pasar por alto, y acepta los roles que se le van a asignar teniendo claro a lo que viene y cómo viene, y aún así, deja su casa por venir aquí. Y a nivel económico, su contrato sería de los más bajos de la plantilla, porque al final es una apuesta de dos partes que quieren arriesgar buscando el bien común de ambos. El jugador ha hecho todo el esfuerzo que puede hacer, incluyendo el hecho de decirle al Espanyol que se quiere marchar, y es ahora cuando Mateo Alemany y Pablo Longoria deben rematar la operación y que todas las partes que coinciden en ella se vayan razonablemente satisfechas.

No hay ningún problema de dinero ni de salarios, eso está totalmente claro y estipulado, simplemente hay una pata de la mesa, el club perico, que quiere algo a cambio, como es normal. El cero total es muy complejo, porque al final todos deben rendir cuentas y esa operación no sería nada explicable a la propiedad, un señor de China al que le deben contar que se deja ir gratis a un jugador con contrato a uno de los equipos más importantes de la Liga. No siendo de tan lejos también sería delicado entender algo así. Es posible que ahora haya un parón de un par de días, pero lo cierto es que las partes se quieren entender.