Lo mejor del Valencia 2017

Estos 12 meses dejan un buen sabor de boca final, con un futuro esperanzador, muy lejos de los nubarrones que cubrían todo hace justo un año

Toni Hernández | 30 DIC. 2017 | 00:01

Lo mejor del Valencia 2017. Si alguien nos llega a decir hace 12 meses si quiera que este artículo pudiera ser escrito, en medio de una de las crisis deportivas más graves de la historia reciente del club, le habría mirado con mala cara como mínimo. Prandelli se iba, García Pitarch iba a ser el siguiente, no venía nadie en el mercado de enero y Voro se tenía que hacer de nuevo con el equipo. Lim parecía dar palos de ciego, y Layhoon trataba de poner en marcha el plan hablado con el dueño, que meses más tarde fue tomando forma. Alesanco se hacía cargo de la dirección deportiva con Vicente Rodríguez de secretario técnico, y se empezaba a armar el Valencia 17/18. Damiá Vidagany movía todos sus contactos en el fútbol español, que son muchos, y empezaban a pasar cosas buenas. En marzo aparecía Mateo Alemany, que ya daba órdenes casi desde el avión de llegada. La elección del entrenador fue el primer escollo grande, con Setién y Marcelino en la mesa. Se consensuó al asturiano, aunque lo que se vendió después fue una guerra que jamás existió. Esos dos fichajes, Marcelino y Alemany, fueron los dos grandes momentos del año.

Con la temporada cerrada por fin, se empezó a trabajar en el siguiente curso, con Marcelino en el banquillo y con las ideas tan claras que más de uno en el entorno se asustó. Todos los que sobraban, fuera, y no fuori, como el gran mentiroso de Prandelli dijo. Sin miedos y dando pasos seguros, que en muchos casos tuvieron gran dosis de incomprensión. Dudas y mala baba, “al Valencia no vendrá nadie”, “Marcelino dimitirá antes de que comience la Liga”, pero el plan estaba trazado y no dejaba margen de dudas. Después llegaron los nuevos, Neto, Murillo, Gabriel, Kondogbia, Maksimovic, Guedes, Pereira, y hasta Lim volvía a Mestalla para ver los partidos. El mejor arranque de todos los tiempos, récord de mil cosas, y la promesa de grandes fichajes para 2018. Si alguien nos lo llega a decir hace apenas 12 meses, quizá le hubiéramos mirado mal, así que aprendamos la lección y vivamos el momento.