Claramunt, Carlos Soler, hacer historia en el Valencia y ser un icono

"Marcelino debe ser para Carlos Soler lo que Di Stéfano fue para mí", dice Pepe Claramunt, y si lo dice parte de la historia viva del Valencia, hay que escuchar atentamente, aunque como me suele pasar cada vez que hablo con él, y para mi es una delicia, un poco de discusión siempre viene bien, aunque aquí le pongo algo de análisis. Cuando don Alfredo llegó al club, en 1970, Claramunt llevaba jugados 156 partidos oficiales con el equipo entre Liga, Copa y competiciones europeas, incluso había sido ya campeón copero en 1967. Carlos Soler lleva 22 partidos de Liga y 3 de Copa, y por desgracia ni si quiera ha podido pelear la consecución se un título ni de lejos. Aunque el autor sea don José, la comparación aún me parece peligrosa, porque podemos dejar al crío (que es un crío), en el camino.

¿Puede ser Soler el nuevo Claramunt? Dicen los que les han visto a los dos que incluso mejor, y no me cabe duda de ello, pero hay que tener calma, hay que darle un entorno tranquilo, debe ir creciendo en responsabilidad, y no tenerla toda de golpe porque eso no será nada bueno para nadie. No pretendo, ni mucho menos, llevarle la contraria a Pepe, faltaría más, pero si que sería bueno dar entre todos calor y confianza a Carlos Soler, y dentro de otros 50 partidos, es decir, un año más, ver dónde estamos todos y qué se le puede pedir de más. Hay urgencia y necesidad de un referente, sin duda, pero que eso no nos haga adelantar unos plazos que deben darse para que todo vaya bien.