Las claves del desastre defensivo del Valencia

El Valencia ha encajado 61 goles en 35 jornadas, está a solo uno de igualar sus peores marcas históricas y es muy probable que cierre la temporada como el peor Valencia en la faceta defensiva que se haya visto nunca. Es el primer aspecto que hay que corregir de cara a la próxima campaña.

Cuando se confirmaron los fichajes de Garay y Mangala nadie hubiera apostado por lo visto este año. El Valencia ha sido un auténtico coladero pero no todo ha sido culpa de los centrales. Mangala ha ido afinándose durante la temporada pero el rendimiento del argentino fue muy decepcionante, tienen su parte de culpa dentro de un equipo que ha mostrado muchas carencias defensivas desde la etapa Ayestarán. El vasco quiso que sus jugadores practicaran un fútbol alegre pero las líneas estaban muy fragmentadas, los centrales quedaban vendidos y tanto Las Palmas como Betis aprovecharon los espacios libres. Prandelli quiso corregir los mecanismos del equipo e incluso cambió el sistema varias veces, pero los errores de concentración continuaron.

El Valencia sufrió en las jugadas de estrategia y sobre todo en los centros laterales. Partidos como los de Anoeta y Vigo sirven para ilustrar esta fase de la temporada. Si a los errores de los jugadores de campo unimos la plaga de lesiones sufrida por los miembros de la defensa, no extrañan los números actuales. Tampoco Alves ha hecho una buena temporada, aunque el brasileño ha vuelto a destacar a la hora de parar penaltis. Con Voro se vio un Valencia más sólido que incluso fue capaz de mantener la portería a cero en varias ocasiones, pero el equipo sigue siendo muy frágil. La temporada está a punto de tocar a su fin y el nuevo técnico tendrá mucho trabajo por delante. Previsiblemente Voro no se quedará y Quique Setién es el máximo candidato. A priori no parece tener el perfil adecuado para cortar este problema de raíz. El Valencia necesita soluciones de urgencia.