Voro no tiene la culpa, no le matemos porque el fútbol sea fútbol

El Valencia va a vivir un final de temporada muy duro, ya se llevan dos vergüenzas seguidas contra Málaga y Real Sociedad, y mucho hay que temer que no sean las últimas, porque si uno revisa el calendario, el tema apunta lo que apunta. Luego hablamos de eso, pero lo que no se puede hacer, el pecado que no se debe cometer, es culpar a Voro de que el equipo salga sin alma, sin ganas y concediendo al rival lo que pida y más. El Valencia no se juega nada, esa es la triste realidad, y el Málaga se jugaba la permanencia y la Real Europa, y salieron con el cuchillo entre los dientes. Es posible que hasta el final de Liga sólo se vea algo de este equipo contra Osasuna, ya descendido, porque si encima no ocurre ese día, apaga y vámonos... los que vayan, que no serán muchos por desgracia.

Pero lo importante, culpar a Voro de proteccionismo, de no matar a sus jugadores en público, de dar la cara por ellos, de todo eso y alguna cosa más, eso no se debe hacer ni consentir. Voro hizo lo que debía para no tener problemas, y no se han tenido, pero el que no tuviera claro que cuando la salvación se hubiera alcanzado podía para esto, es que es un iluso. Si, los jugadores unos irresponsables y alguno un caradura, pero el fútbol es esto, no nos engañemos. Pero Voro no tiene la culpa, en absoluto, faltaría más. Lo que debería ocurrir es que se hiciera oficial que no sigue cuanto antes, que se tuviera claro dónde va, y que el nuevo entrenador quedara claro ya.