Lo de la falta de conexión entre los dirigentes del Valencia y la grada sí es un cuento chino

Uno de los argumentos más usados ahora para cargar contra Lim, y mira que hay, es algo que no se sostiene salvo en tiempos en los que la pelota no entra ni queriendo

Toni Hernández | 08 NOV. 2016 | 10:04

14 de agosto de 2003, el presidente del Valencia Jaume Ortí tiene el turno de palabra el día de la presentación del equipo después de un verano en el que el entrenador, Rafa Benítez, y el director deportivo, Jesús García Pitarch, se han pasado discutiendo dos meses por los fichajes, haciendo famosa la mítica frase "me han traído una lámpara y un sofá". Cuando el máximo dirigente toma la palabra, en uno de los momentos de falta de respeto más grandes de la historia de Mestalla, no se le dejó hablar, se le calló literalmente, aunque Jaume pudo decir aquello de que "al final de temporada os echarán humo las manos de aplaudir a este equipo". Luego vino el Doblete. Antes de Jaume estuvo Pedro Cortés o Paco Roig, incuso Arturo Tuzón. A Pedro se le dijo de todo y tuvo que dimitir por Mendieta, a Paco más (fue el fundador del "vete ya") y don Arturo se le cantó el famoso "suelta los duros". A Juan Soler ni lo comento, y de Llorente prefiero no hablar. ¿Salvo? El populismo llevado al extremo y que conectó sólo con una parte, no con todos, que esa es otra leyenda urbana que no se sostiene.

¿Justificar a Lim? Neville fue una aberración, Ayestarán un error imperdonable, Nuno un mal experimento. Que ese ha sido el gran error, que es una cagada gigante, que por más veces que lo digamos, ni se limpia ni se arregla. Pero de ahí a montarnos películas... Lo del estadio es un golpe moral más que real, porque tenerlo para el Centenario era perfecto por todo. ¿Lo de Mendes? Un tipo que trae a André Gomes por 14 y lo coloca por 55, y trae e Otamendi por 12 y lo saca por 40, por mucha comisión que se lleve, a ese lo quiero yo en mi equipo siempre. Pero ahora "mola" más cargar contra un agente. Perfecto, que aquí cada uno puede pensar como le de la gana, hasta yo. Que los errores, con dinero de Meriton, está muy claros, y en ellos está la solución, no hay más. Y generar más tensión ya es cosa de cada uno, aunque tengo claro que la inmensa mayoría sigue sin entender que es este Valencia, cómo funciona, y que las tácticas del terror de toda la vida ya no valen.