Fran Villalba renovará con el Valencia: que no se repita otro "Caso Tendillo"

El canterano seguirá en el club si la reunión entre sus agentes y el Valencia acaba bien, pero el trabajo sólo habrá empezado y será largo

Toni Hernández | 18 OCT. 2016 | 09:24

El Valencia va a renovar a Fran Villalba, pero dentro de su idea de trabajo con el canterano y no por las presiones absurdas de un entorno necesitado de generar ídolos y referentes a toda velocidad, o con hambre de criticar todo aquello que no sea hacer "lo de toda la vida". Porque el jugador es un diamante en bruto, eso nadie lo ha puesto ni lo pone en duda, pero mucho experto en fútbol de todo a cien ha querido que el proceso de formación y maduración de Villalba sea inmediato, sea ya, y esas cosas llevan su tiempo. "Lo quiere el Madrid, lo quiere el Manchester United", sí, vale, perfecto, lo mismo que a Alberto Tendillo hace apenas 3 años. Ah, ¿que nadie se acuerdo de Tendillo, el hijo de Miguel, el jugador al que había que renovar porque era el símbolo de la cantera? ¿Alguien sabe dónde está? En el Alzira, en Tercera división, después de haber estado el año pasado en el Badalona, en Segunda B, donde apenas jugó. Los mismos bocazas que pusieron el grito en el cielo y mataron la carrera de Tendillo son las voces que ahora han puesto el nervio con Fran.

De Tendillo jamás se hablará, se echará tierra sobre el asunto y será un tema olvidado. Y lo que hay que evitar es que con Fran Villalba pase lo mismo. Se ha dicho de todo a Curro Torres por no ponerlo siempre como titular, se ha dicho de todo a Alexanco por renovarle a precio de jugador contrastado de primer equipo, y nadie, NADIE, se ha parado a pensar en si el jugador estaba hecho, maduro, preparado para jugar siempre, para aguantar la presión de tener 18 años y estar en boca de todos, de ser observado al subir al primer equipo. Se ha llegado a pedir la cabeza del directo de la escuela por renovar su contrato de forma inmediata. Y yo me sigo acordando de Tendillo, y de otros muchos que fueron devorados por ese ansia de correr hacia ninguna parte. Mucho experto en fútbol que no tiene ni la más miserable idea.