Derrota entre la indiferencia de Mestalla (0-2)

El Valencia volvió a decepcionar y fue derrotado de forma clara por un Villarreal que jugó con muchos jugadores no habituales, los de Ayestarán no tuvieron pegada en ataque y concedieron demasiadas licencias atrás. Mestalla echó en falta actitud en los jugadores y terminó condenando a los suyos con el castigo de la indiferencia, el efecto Ayestarán se diluye de forma meteórica y su continuidad es cada vez más complicada.

El Villarreal presentó muchas novedades en su once inicial pensando en el trascendental choque del jueves ante el Liverpool, sin embargo los de Marcelino afrontaron el encuentro con la convicción de asegurar la cuarta plaza y evitar urgencias de última hora. En frente un Valencia que quería dar una alegría a la afición tras la decepcionante campaña vivida, pero los de Ayestarán volvieron a mostrar su peor cara. Ni en el mejor de sus presagios Marcelino hubiera pensado que ganar en Mestalla sería tan sencillo. El Valencia (en el que no jugaron de inicio Enzo Pérez ni Paco Alcácer) intentó llevar la iniciativa en los primeros minutos con más chispa que cabeza, El dominio en la posesión no fructificó en los primeros diez minutos y el Villarreal lo aprovechó dando el primer golpe.

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Samuel recibió en el área ante la pasividad de la zaga local. Espero, buscó el hueco y logró engañar a un Alves que nada pudo hacer. Los nervios volvían a aparecer en Mestalla aunque se confiaba en la reacción. Sin embargo, el gol desencajó por completo el esquema previsto por Ayestarán y el Valencia solo encontró profundidad con tímidas internadas de Cancelo, o balones sueltos que no encontraron rematador. El dominio era del Valencia pero como ha pasado tantas veces durante la temporada, estéril en eficacia, de hecho Areola no tuvo que intervenir a penas en el primer tiempo. En el minuto 33 Adrián cogió adelantada a la defensa valencianista y logró superar sin dificultades a Alves para establecer el 0-2. Partido muy deficiente de Aderllan Santos y Mustafi, que sufrieron en exceso las pérdidas de balón en el centro del campo pero tampoco estuvieron contundentes atrás.

Con un Valencia sin mordiente ni actitud terminó la segunda parte. Tras el descanso Ayestarán no hizo cambios y el Valencia intentó meter miedo a un Villarreal que cada vez reculaba más y contemporizaba, consciente de que con orden sería difícil tener problemas. El conjunto amarillo tuvo varias ocasiones para ampliar el resultado, incluso con un balón despejado por Siqueira que golpeó en el palo. Cheryshev volvió a Mestalla pero tampoco pudo ayudar a encontrar huecos en la defensa visitante, el único peligro llegó con dos corners cerrados en los que Parejo buscó el gol olímpico. También se retiró Roberto Soldado entre pitos de la grada, el valenciano realizó un buen partido y desquició una y otra vez a Aderllan. Con el 0-2 se llegó a los últimos minutos en medio de la indiferencia de la grada. La afición no castigó a los suyos con pitos pero sí con una actitud que refleja a la perfección el drama vivido esta campaña en Mestalla. El Villarreal cerró el partido en el área del Valencia y celebró su clasificación para la Champions con el pitido final.