El Valencia y la obligación a sus niños de la Academia Gloval y sus padres de ir a Mestalla contra el Barcelona

Mi experiencia personal, que me ha costado muchos disgustos, me dice que cuando convocas a la cantera no van, cuando no les invitas se quejan, pero que nunca es malo

Toni Hernández | 09 FEB. 2016 | 11:50

El Valencia podría haber solicitado de forma explícita a padres y niños de la Academia GloVal que vayan el miércoles al partido de Copa del Rey contra el Barcelona en Mestalla, que no tiene nada en juego por el 7-0 del Nou Camp, que además es día de pago para los abonados, 10 euros en todos los sectores del campo, y donde se corre el riesgo, muy real, de ver el campo semi desierto, y con los que vayan, con la intención, totalmente respetable y justificada, de ir a acordarse de la familia de todos y cada uno de los jugadores y miembros del cuerpo técnico con Gary Neville a la cabeza.

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Al parecer, esta medida ya habría sido solicitada en pasadas eliminatorias de Copa, donde Mestalla también presentó un ambiente desangelado. Personalmente creo que es un medida acertada, pero que tiene que ir acompañada de otro detalle. Me explico. Convocar a la escuela siempre es bueno, se crean sinergias, aunque normalmente te quedas despagado, porque la respuesta suele ser bastante menor de la que esperas. Eso si, si hay un partido cumbre y te solicitan entradas, si no las das, te quieren colgar del palo mayor.

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Guerra perdida por tanto. Convocarlos está bien, obligarlos es una política habitual en muchos clubes a niveles de base (que el Valencia no ha inventado esto), pero, dadas las circunstancias, en una política de gestos, que no me gusta demasiado, pero hay que ser justos, el abonado no debería pagar en este encuentro.

Aunque sinceramente creo que estamos en una situación de tal estado de nervios, que cualquier cosa, y no digo que esto no tenga importancia, se convierte en un problema de vida o muerte, se magnifica porque hay muchas cosas que no están bien, y la presión y tensión hace que muchas cosas que deberían salir por ellas mismas, no lo hacen. Al final, la máxima reza que "mal si vas, mal si te quedas. No obstante, estos comunicados internos que son filtrados a los medios y redes sociales, tampoco ayudan.