Otamendi, las formas te pierden

El central argentino no ha sabido manejar su ansiedad por salir del club ni tampoco ha destacado por sus formas a la hora de marcharse

Nacho Ballester | 17 AGO. 2015 | 10:23

La realidad del caso Otamendi, ya casi ex central del Valencia CF, es la de un jugador que quiere marcharse a cualquier club que le ofrezca más dinero, algo que parece normal si lo vemos desde el punto de vista de un trabajador normal. Pero aquí es donde entra la 'persona' y las formas de hacer las cosas de cada uno. Nicolás Otamendi se ganó el cariño de la afición valencianista tras venir de hacer una temporada horrible en el Oporto y aceptable en el At. Mineiro. El Valencia CF le dio el liderazgo de su zaga y además le 'devolvió' al panorama internacional y a la selección argentina del Tata Martino. Otamendi no ha sabido marcharse como tocaba, es más, se marchará por la puerta de atrás y generando un odio 'lógico' de la afición che. La clase de Nico está dentro del césped y no fuera.

Nicolás Otamendi provocó una guerra a través de su agente, Eugenio López, nada más salir que no hacía ninguna falta. El jugador se debe al club de Mestalla y su contrato dejaba bien claras las condiciones ante un posible traspaso: 50 millones de euros. El 'iluminado' de Eugenio López aceptó el contrato y luego fue a rajar al club por no dejar salir al jugador por 35 millones de euros (oferta que presentó el Manchester United en enero de 2016). El mismo Eugenio López ha sido el encargado de llevar la estrategia de salida de Otamendi en todos los sentidos. El Manchester City fue el último en interesarse por Otamendi y Eugenio López no quería desaprovechar la oportunidad.

Otamendi en la presentación del Valencia

El central argentino le pidió a Nuno Espirito Santo no entrenar ni tampoco que le convocase para el partido ante el AS Monaco ya que 'se jugaba mucha plata' en su traspaso. Reitero, todos queremos ganar más dinero en nuestros trabajos, pero hay formas y formas de marcharse de los lugares. Los futbolistas quieren crecer cambiando de un equipo bueno a otro mejor y así sucesivamente, pero suele ser por la ambición de ganar títulos, además del dinero.

Lo único que podría 'arreglar' algo el asunto de Otamendi es que este diese una rueda de prensa a modo de despedida del club y de los aficionados que tanto cariño le han brindado durante todo el año. Eso no borraría las formas, pero ayudaría a dejar una mejor imagen del que fue uno de los mejores centrales de la historia reciente del Valencia CF.