Emery sigue jugando a la ruleta rusa

El Valencia se deshincha sin parar como un globo pinchado. El equipo de Unai Emery lleva jugando toda la liga igual, solo que al principio la suerte caía de su lado. La continua metamorfosis del equipo dentro de los partidos está afectando cada vez más al juego y a la mentalidad de los futbolistas blanquinegros.

Unai Emery está jugando a la ruleta rusa en cada partido y, claro, luego pasa lo que pasa. Enumerados los partidos ligueros: Con el Racing de Santander se salvó por los pelos; con el Atlético de Madrid se ganó por la mínima y con un gran Guaita; con el Sporting de Gijón se jugaron bien 45 minutos; con el Barcelona se hubiera perdido si el partido dura 10 minutos más; del partido ante el Sevilla ni hablamos; el del Granada fue lo peor que se ha visto en Mestalla este año y no se empató de milagro; en Mallorca se hizo lo mínimo de lo mínimo para ganar y al final un error arbitral provocó el empate.

Y por último el Athletic de Bilbao ayer. Otra vez lo mismo. El equipo sale a tumba abierta y va deshinchándose desde el minuto 30 más o menos hasta el final del choque. Si el Valencia no marca en esos 30 minutos de locura, luego lo pasa realmente mal para abrir la lata con equipos que se encierran atrás. Y si marca sólo un gol en esos minutos iniciales, luego no sabe cerrar los partidos. Conclusión: El Valencia es un equipo tremendamente vulnerable, es demasiado fácil hacerle daño.

Emery lleva cuatro años jugando a lo mismo y la grada de Mestalla está empezando a cansarse si no se ha cansado ya. Partidos controlados que se pierden o empatan como el del Bayer Leverkusen, falta de ambición para cerrar y ganar partidos como por ejemplo el del Granada en casa o el del Genk en Bélgica. Todo esto termina pasando factura en el deportivo y también en lo psicológico porque el futbolista va a estar pensando siempre que el otro equipo puede remontarles. El propio entrenador del Leverkusen comentó tras ganar al Valencia que "cuando apretaron poco antes del descanso, vieron que el Valencia era vulnerable".

Creemos sinceramente que (los resultados y el juego lo demuestran) el Valencia necesita un cambio de entrenador para limpiar un poco el ambiente enrarecido que lleva dejando Unai estos cuatro años. ¿Será el momento de Rafa Benítez?