La rendición de Breda

Partido suspendido y Rubén lesionado

Rafa Carretero | 27 JUL. 2011 | 10:47

La minigira del Levante en Holanda y Bélgica terminó como el rosario de la aurora. El árbitro suspendió el partido contra el Nac Breda en el minuto 57 con 0-0 en el marcador a raíz de una tángana.

El partido de amistoso tuvo poco. Al cuarto de hora ya se habían visto cuatro amarillas, lo que habla del juego brusco empleado por unos y otros. Hasta Juan Ignacio se metió en el campo y llegó a una de las áreas para darle un estirón de orejas al trencilla, totalmente superado.

La chispa saltó con la expulsión de Valdo a raíz de una durísima entrada. En la tángana de jugadores que se formó, un aficionado trató de agredir a Juanfran, pero su puñetazo terminó en la cara de un jugador del NAC, lo cual agrandó la confusión. A partir de ahí, el árbitro no quiso saber más y se fue para no volver. Futbolistas como Rafa Jordà pidieron más tarde perdón a los aficionados levantinistas por el bochornoso espectáculo.

Lo peor, sin embargo, fue el peaje que tendrá que pagar el Levante en forma de lesión. Rubén Suárez, víctima de otra acción excesivamente brusca, no podrá empezar la temporada, ya que estará un mes de baja. Las pruebas médicas que se le efectuaron en el hospital de Breda determinaron que presenta una subluxación en el hombro izquierdo.

Está previsto que el Levante llegue a Valencia sobre la 1:00 de la madrugada. Antes de volar a España, Juan Ignacio dirigirá una suave sesión de entrenamiento en Kamperland, el que ha sido el centro de operaciones granota.

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