Reparto de puntos y todos contentos

El Ciutat de Valencia finalmente se ha vuelto a vestir de fiesta para el Barcelona. El conjunto catalán ha cantado el alirón en el estadio del Levante como ya lo hizo en 2005. Es su talismán particular. Si no era suficiente motivo para organizar una fiesta, los locales se han querido sumar al evento, con el punto obtenido dan un grandísimo paso hacia la salvación.

Antes del partido se hablaba sobre el famoso pacto de no agresión. Con un punto cada uno, los dos equipos se iban a casa con los deberes hechos, y así fue. Empate a uno en el marcador final y todos felices. Enhorabuena y hasta el año que viene.

Antes de todos los abrazos, el partido. El cual tuvo interés en su primera mitad. Los locales salieron decididos a marcar pronto. Sabedores del buen hacer del Barcelona con el balón, intentaron entorpecer lo máximo posible la creación blaugrana. En el minuto 10 llegó la primera ocasión para los locales, pero Valdo no pudo aprovechar un centro de su compañero Caicedo. El Levante buscaba la portería de Valdés, buena señal. Pero el minuto 27 Keita marcaba el tanto culé con un tremendo testarazo. Se ponían las cosas feas en el Ciutat de Valencia. Los granotas supieron aguantar la presión y antes del descanso Caicedo, Caicegol para los amigos, ponía en empate final.

Ya en la segunda parte nadie quiso arriesgar y el partido terminó con el abrazo de los dos equipos, que acabaron contentos y radiantes.