Cuando el entorno del Valencia no quiere entender una operación que nos ha superado a todos

Cuando cierta parte del entorno del Valencia pone a parir la operación de Goldman Sachs, me convenzo más aún de que es muy buena. Y no creo que sea ir al revés del mundo o en contra dirección de nadie, porque ademas pienso que son ese grupo de gente los que están confundidos.

Porque más allá de que parezca mejor o peor o de que se analicen unas condiciones que son buenas (mucho más que de mercado, aunque claro, hay que conocerlo para saber tal cosa), viene la parte del relato, la que dice que todo lo que venga del Valencia es malo, que todo lo que haga Lim es malo, y que todos los que no decimos eso somos unos vendidos traidores.

Y no llaman gilipollas a los del Goldman Sachs porque les debe dar apuro, porque claro, aquí se prestan 550 milos al aire como si nada porque le debemos car muy bien a alguien al otro lado del charco, no me cabe duda de ello… Se pretendía hacer negocio con el Nuevo Mestalla, se pretendía que los políticos poco menos que expropiaran el Valencia a Lim, se pretendía mandar sin poner un euro (algo muy habitual por estos lares), y todo eso ha quedado borrado de un plumazo y para siempre, y entiendo que no es una derrota fácil de asumir.

Pero más allá de estas consideraciones, lo que debe quedar por encima de todo es el Valencia, y las guerras particulares de cada uno, en el patio de su casa, no a coste del escudo, porque ese no tiene la culpa de nada, que siempre los estamos manchando con la bastarda excusa de defenderlo. Y esto sólo ha empezado, dicho sea de paso.