Un giro a la historia actual del Valencia, por favor
Son muchos años en una dirección que no tiene sentido, y que hay que cambiar, como sea, y hacerlo ahora mismo

La historia del Valencia contemporáneo debe cambiar, de forma radical, en 180 grados. 2019 fue el principio del fin a una buena época, no extraordinaria, no nos volvamos locos ni menospreciemos nuestra propia historia, pero sí buena.
Desde entonces han sido 6 años en los que esto ha sido un desierto, plagado además de problemas, guerras, actitudes inverosímiles, decisiones marcianas, intereses particulares, y todo ello con el club en medio, desangrándose ante la mirada de todos, pero sin que nadie, de verdad, bajara a parar la hemorragia.
Entre todos la mataron y ella sola se murió sería el título de la película, ya lo sé, porque cuando preguntas, aquí todos hemos sido un ejemplo de no sé muy qué, pero ese tema ya ni lo toco, no tiene sentido. Porque además, al margen de todo lo que ha sucedido en el entorno más tóxico de todos los tiempos, desde donde debe llegar ese cambio es desde dentro, desde Meriton, desde la familia Lim, con Peter y con Kiat, y con quien sea necesario, porque si ellos no entienden que este no es el camino, o si lo es resulta el que conduce al desastre, estamos muertos en la bañera.
El Valencia no puede ser una mera comparsa en esta Liga y un equipo que ve Europa siempre por la tele, porque aunque no hemos sido nunca de ganar todos los años algo, que tendemos a idealizar cosas que no han existido, tampoco hemos sido esto, desde luego que no. Y toca, mientras venden o no venden, darle un giro radical a esta situación, que es algo que sólo depende de los gestores de Singapur. De nadie más, por muy tentador que sea poner a parir a los de aquí.