El Valencia de Corberán y una presión que debe existir
No se debe olvidar que cerrar la permanencia no es un objetivo para celebrar sino una obligación, no es momento de sacar pecho ni de regalar puntos independientemente del rival

La semana viene marcada por una serie de resultados que han beneficiado al Valencia, podemos definir estos días como de relativa calma. Pero esta tranquilidad llega por la penosa temporada que está firmando el equipo, se ha visto el pozo muy de cerca y ocurra lo que ocurra a final de campaña la nota debe ser de suspenso a nivel global. Eso no quita para valorar la reacción que ha mostrado la plantilla y el buen trabajo de Corberán hasta el momento.
Pero es momento de mantener los pies en el suelo, no enviar elogios excesivos y presionar. Sí, porque en este Valencia CF es necesario exigir teniendo en cuenta los precedentes, la mentalidad de dar por hecho que el Valencia saldrá derrotado del Santiago Bernabéu es impropia de un club de esta entidad. Evidentemente el equipo lo va a dar todo a pesar de que es una misión complicada, pero el mensaje que se lanza desde ciertos sectores es peligroso.
Se forzaron tarjetas aunque los protagonistas no lo reconozcan abiertamente, pero acudir con bajas importantes no será una excusa si el Valencia no mantiene la actitud y el nivel competitivo. La presión es necesaria, el compromiso innegociable.