El Valencia gana sufriendo y aleja el descenso

Un Valencia - Mallorca para seguir buscando la salvación, en Mestalla, con un maravilloso sol en la ciudad, con un campo lleno, con una afición volcada. Un equipo, el de Corberán, que sigue repitiendo una forma de jugar, un planteamiento, una filosofía. Un equipo que gustará más o menos, pero que empieza a ser muy identificable. Un arranque soso, con ambos contendientes estudiándose, y unos primeros 15 minutos que no serán especialmente recordados por nada.

A partir de ahí, el Valencia se lanzó a por el partido. Javi Guerra estaba a punto de marcar porque su disparo era desviado al palo por Raíllo, en el 24, y poco después otro remate en balón parado que sacaba sobre la línea el portero visitante. Era el momento de apretar de verdad. Pasada la media hora el encuentro se volvía a calmar, como tomándose un respiro. Entrando en el 40 ellos no es que fueran superiores, pero sí se jugaba a lo que buscaban, y eso, conforme estamos, no es algo positivo, en absoluto. En el 45, encima, el Mallorca tenía su llegada más peligrosa, que tampoco lo era mucho, pero era. Así nos íbamos al descanso, con una primera mitad que no fue nada buena.

La segunda parte arrancaba sin cambios, pero con la necesidad de borrar el mal final, y sobre todo, ir a por el partido. A los 40 segundos Mamardashvili hacía una parada enorme a un disparo desde fuera del área, en lo que era otro aviso, mucho más serio, de los visitantes. Pero en el 49 , una gran jugada de Almeida, robando arriba y asistiendo a Diego López, permitía al guajín marcar de nievo en un momento que el equipo lo estaba necesitando, y mucho. Era lo mejor que nos podía pasar. Y Diego podría haber hecho el segundo en el 53 después de un gran centro de Foulquier que remató, sólo delante de puerta, un poco forzado y arriba cuando ya se cantaba el tanto.

En el 64, el Mallorca no empataba por medio palmo, ya que en otro error terrible defensivo, Asano remataba solo en boca de gol pero se le iba. Momento de cambios, y un gris Javi Guerra daba paso a Pepelu, y Diego López, tocado, se iba por Fran Pérez. Ambos habían jugado con la sub21 entre semana. En el 74 se iban Almeida y Sadiq y entraban Diakhaby y Rafa Mir. Se entraba en el tramo final con todo demasiado abierto, nosotros con 3 centrales y sin generar peligro al Mallorca para que se fuera arriba tan alegremente. En el 94 se marchaba Luis Rioja y entraba Jesús Vázquez.