El Valencia y la necesidad de levantarse

Todavía con el eco de la vergonzosa actuación del pasado jueves ante el Barça, el Valencia de Corberán prepara el trascendental encuentro ante el Leganés. Nadie dudaba de cuál era la prioridad del club, pero la manera de caer ante el Barça fue absolutamente imperdonable y el público abandonó Mestalla decepcionado y todavía con menos esperanza que hace unas semanas. Corberán no estuvo acertado ni en la elección del once ni con el planteamiento, pero sus palabras en rueda de prensa sonaron repetitivas y poco consistentes.

El técnico habló de luchar por dar una alegría a la afición refiriéndose a la permanencia. Su discurso mantuvo las mismas insensateces que Corona defiende en cada comparecencia pública, el desequilibrio de la plantilla es un hecho y la unidad B quedó muy señalada tras la actuación copera. No hay excusa para nadie, tampoco para unos jugadores que no han evolucionado en la línea de la pasada temporada.

El encuentro ante el Leganés es otra final, la victoria una obligación. Restan varios meses de competición que se van a hacer muy largos, angustiosos. Si el descenso se consuma será la caída al vacío definitiva, los responsables está claros en una pirámide que comienza en Peter Lim y pasa por la secretaría técnica o los entrenadores. Se viven horas tensas antes del duelo ante el Leganés y es momento de que Mestalla dicte sentencia.