La realidad de un Valencia sin fichajes… o no con los que tocan

Un Valencia sin fichajes es carne de Segunda. Pero no ahora, lo venimos avisando desde antes que empezara la Liga, en concreto el 4 de agosto. "El objetivo del Valencia es no bajar a Segunda. Es muy duro y muy vergonzoso, pero es lo que tenemos delante. A partir de esa realidad, podemos elegir entre ayudar a Baraja y su gente o quemar la falla. Y apoyar al equipo no quita para que se siga la guerra contra la propiedad". Nada ha cambiado excepto el Pipo.

De hecho, si cambiamos el nombre de Rubén por el de Corberán, la reflexión anterior vale al 100%, porque en 6 meses está todo igual, a falta de ver si somos capaces de marcarnos un final de mercado "a lo Rufete", que es algo en lo que, ahora mismo, no es que tenga demasiadas esperanzas. Pero volviendo al tema, el Pipo se pudo equivocar en muchas cosas, seguro, pero estaba claro que sin piezas de más nivel esto que pasa podía ocurrir.

El técnico de Cheste está trabajando bien, está haciendo las cosas que tocan y como tocan, y aunque lo de Barcelona fue un borrón, tampoco se le puede matar por internar hacer algo en lo que cree, pero que no estamos preparados para poder llevar a cabo. Si el club, si Peter Lim, no le da armas, estaremos como el pasado 4 de agosto, esperando que los planetas se alineen, porque en caso contrario, ya sabemos qué pasará al final.