Las dificultades añadidas a las que se enfrenta el Valencia CF
La mente sigue puesta en las víctimas pero en clave deportiva para el Valencia no va a ser fácil enfrentarse a la realidad
Pasará mucho tiempo hasta que la provincia de Valencia recupere una cierta calma, desgraciadamente para algunos nunca llegará porque han perdido a sus seres queridos, sus negocios o sus viviendas. El fútbol sigue parado pero haciendo un paréntesis en el dolor y pensando en clave deportiva, para el Valencia el escenario deportivo va a estar más cuesta arriba incluso de lo que estaba antes de la Dana.
Calendario incierto. El Valencia ha perdido el ritmo competitivo y no sabe cuando volverá a jugar, ni siquiera el encuentro de copa que ya tiene fecha está al 100% seguro de disputarse en la fecha programada. El equipo de Baraja se enfrenta a una dificultad añadida, es colista en la clasificación y verá la tabla con varios partidos jugados menos que sus rivales y probablemente descolgado, más presión para los jugadores.
Hay que medir muy bien las cargas de trabajo pensando en las lesiones, la enfermería está cargada y la falta de competición y el estrés puede hacer que aumente el riesgo de lesiones musculares. Por último, los jugadores son humanos y por supuesto no son ajenos a una tragedia que ha conmocionado por completo a toda la sociedad, recobrar el interés por el fútbol requiere su tiempo (a los aficionados nos referimos) aunque esta desgracia pueda servir de acicate y unión a medio plazo.