Peter Lim como principio y fin de los malos, y no tan males, del Valencia
El máximo accionista es quien ha marcado absolutamente todo en la última década, y aún le quedan varios capítulos

Todo lo que pasa en el Valencia, y ha pasado desde hace 10 años, depende de Peter Lim. Bueno y malo, no nos vamos a llevar a engaño, que es tentador, pero igual que ahora llevamos 5 años que parece que nuestro máximo accionista sea nuestro peor enemigo, veníamos de dos campañas en las que dio el Ok a casi 300 millones de euros en fichajes, que eso, como lo de ahora, también pasó, y son esas contradicciones extremas de Meriton en estos lares.
Quien quiera ver en todo esto una defensa de Lim, vaya, puede ir cambiando de canal, porque los tiros no van por ahí, ni mucho menos. Simplemente recalco que lo que nos ha sucedido desde que culminó el maldito proceso de compra sólo ha dependido de un señor sobre el que absolutamente nadie de la ciudad ha tenido la más mínima ascendencia, y eso es algo que no había sucedido jamás en toda la historia, y que no tengo claro si es bueno o malo.
Y esto es, al mismo tiempo, un aviso para navegantes. Porque en el siguiente proceso de venta, que lo va a haber, claro está, todo, absolutamente todo, seguirá pasando por Peter Lim, y sólo por Peter Lim, y aquí nos vamos a enterar de las cosas cuando estén terminadas, nunca antes, a no ser que él quiera que sea de otro modo, tengamos eso claro. Y para rematar, pensemos que con el que venga, las cosas serán iguales. Le vendimos nuestra alma al diablo, y este es el precio.