No entiendo las ganas de repetir tantas veces lo mal que está el Valencia: ¿arreglamos algo?

No sé cuántas cosas negativas más se pueden decir del Valencia. Ha sido una semana en la que no ha faltado un dato malo, una comparativa negra, una racha funesta... Todo como muy en formato regodeo, como si no hubiera bastante con lo que hay, que además hay que restregarlo por la cara de nosotros mismos, para que haga el máximo daño posible. Jamás en la vida he entendido esta forma de proceder, y siempre la he criticado, no me voy a esconder ahora.

Estamos como estamos, muy mal, con 5 puntos de 24 posibles, en descenso, con sensaciones que son para salir corriendo especialmente fuera de casa. Vale, está claro, ya lo sabemos. ¿Lo vamos a mandar todo por el aire cuando faltan todavía 90 puntos por jugar? No sé cuántas encuestas he leído sobre qué hacer con Baraja si se pierde en Leganés, incluso con la lectura, bastante amplia, de que su tiempo aquí ya ha terminado. Y no doy crédito.

Porque lo que no vemos, o no queremos ver, es que tenemos lo que tenemos, nos salvamos hace dos años, y el año pasado, por lo que nos salvamos, y si este año nos volvemos a salvar, será exactamente por lo mismo. Flagelarse de modo constante sobre lo mal que estamos, la vergüenza que estamos pasando, lo indigno que es Lim y todo lo demás, pues bien, vale, pero hasta donde yo sé, eso no nos va a dar ni un punto, y necesitamos muchos.