El Nuevo Mestalla: de nuevo un tema olvidado
El verano ha pasado, y aunque fue por momentos de cierta intensidad, la apariencia es que las cosas han quedado muy en suspense

Que el Valencia termine el Nuevo Mestalla es esencial para el club, y para la ciudad. Veo que vuelve a ser un tema que cae en el olvido, porque los calores del verano, aunque en julio paso casi de todo, parece que el personal anda en otras historias, como si esto sólo fuera importante en momentos concretos, en situaciones de tensión social o cuando estamos a las puertas, o algo más, de quedarnos sin ser sede del Mundial 2030.
Todo es mucho más sencillo que eso, y forma parte de un proceso que, si se tiene claro, nos lleva al lugar que queremos ir. Aunque empiezo a pensar que alguno tiene el “síndrome de Estocolmo”, porque en lugar de facilitar que Lim se vaya, porque entiendo que eso de echarle ya tenemos claro que es un brindis al sol después de una noche dura, hacemos todo lo posible que para que ese hombre se quede aquí de por vida.
Y es que intuyo que muchos van a vivir peor sin él que con su presencia, porque cuando desaparezca el enemigo, su razón de ser habrá terminado, y entonces pasarán a ser seres sin ningún tipo de relevancia, algo que me temo que no les gusta en absoluto. Y eso va haciendo que todo se eternice, que nos pongamos en posiciones que no hay por dónde cogerlas, que lo hagamos todo complicado, y eso a costa de perjudicar al Valencia, que es al final el que termina pagando los platos rotos de esta situación marciana.
Es cierto que el club debe coger el toro por los cuernos y meter ya de una vez máquinas a trabajar, porque cuando eso pase, nadie podrá hacer más el indio, aunque tengo claro que lo internarán, porque es su forma de vida valencianista.