Que el Valencia no tenga extremos es imposible de entender

El Valencia necesita fichar dos extremos con máxima urgencia. Luis Rioja tenía que ser el primero, se suponía que estaba hecho, pero primero fue la llegada de Rafa Mir y luego las exigencias de Peter Lim, y de esperarlo para jugar el 20 de julio contra el Castellón, hemos pasado a estar a 4 de agosto sin que haya noticias suyas, y pensando que lo normal es que el andaluz no termine llegando, de nuevo, para jugar en Mestalla. 

A partir de ahí, y contando en la plantilla con Sergi Canós (que por fin podía hacer la pretemporada en condiciones, pero se ha vuelto a lesionar) y Fran Pérez (que debe dejar ya atrás sus problemas de espalda), nos hace falta otro extremo (si Rioja no viene) para tener dobladas las posiciones y que no nos vuelva a pasar lo del año anterior. El fichaje de Dani Gómez para liberar a Diego López puede ser uno, que no específico, pero seguiría faltando otro.

Toca ir al mercado y cerrar, cuanto antes, un extremo, porque el juego ofensivo por bandas es algo vital para Baraja. Además, debemos contar con que Gayà no estará hasta septiembre, si todo va bien, con lo que doblar lateral, al menos por la izquierda, no será tampoco posible. Veremos hasta qué punto tenemos hechos los deberes de la planificación por un lado, y por otro, vamos a también a dejar claro el punto de ambición de la entidad.