En Valencia ya no hay ganas de pensar en fútbol, ¿verdad?

Hay ganas de cualquier cosa menos de lo más imprtante, o que debería serlo, y eso dice muchas cosas sobre cómo estamos

Toni Hernández | 21 JUL. 2024 | 00:01
Valencia CF

Hay quien tiene más ganas de vender jugadores del Valencia que Peter Lim. No es la primera vez que lo digo, y lo pienso de un modo totalmente serio, porque estamos asistiendo a procesos que son, como poco, delicados de ver.

Mucha ansia porque el club cierre operaciones de salida, entiendo que para luego poder criticarlas, ya que no lo veo otro sentido a esa forma de actuar. Alguna llamada de un agente amigo, medias verdades, algo de cosecha propia, una pizca de exageración, y te sale el cocktail perfecto de la presión al Valencia, como si realmente estuviéramos en la total obligación de vender, barato y de forma inmediata, a nuestros jugadores.

Es curioso lo que pasa, porque repito, en el mismo contexto, se dice que vender es malo, pero es como si se metiera prisa por hacerlo. ¿Alguien entiende algo? Porque si es así, ruego que me lo expliquen, que yo me pierdo. Y pasarán los días, los deadline caerán, y entonces llegará el silencio, o el tal club “se ha cansado de esperar”, como si eso fuera malo, o como si lo que tocara fuera ir corriendo y dejar a tus activos a precio de saldo, que entiendo que sería bueno para el famoso relato, pero para en nada en absoluto positivo para el club.

Insisto en que todo es extraño, que no debería sorprender a estas alturas de película, pero que no por ello deja de ser llamativo, ya que no hay por dónde cogerlo, sea quien sea la mano que esté meciendo la cuna, que por cierto, son varias.