Tomarse en serio la compra del Valencia

Nadie va a comprar el Valencia a Peter Lim por 112 millones de euros. No, no se trata de faltar al respeto a nadie, que eso ya lo hacen con algunos de nosotros, sino de afrontar de verdad una situación que no se puede encarar con shows que no tenemos claro que no van a valer para nada, van a enfrentar (porque habrá quien sienta atacada su inteligencia) y que el nombre del Valencia siga siendo una especie de moneda de cambio para poder tener algo de foco.

Que haya quien se mueva para intentar cambiar la situación me parece loable, y eso jamás se puede criticar aunque no se esté de acuerdo con las formas, que nunca sucederá con el fondo. Pero hay cuestiones que no son menores, ni mucho menos, y que se deben tocar.

Hacer responsable al valencianismo, a los aficionados, de comprar el club a Lim, y que si no ponen dinero es que están anestesiados y les da todo igual, no es que me parezca injusto, que lo es, sino que resulta de todo punto vergonzoso, porque ellos, nosotros, de todo esto no tenemos la culpa, sólo faltaba.

Volcar la frustración de no tener dinero para comprar nada en otros es muy lamentable, y no se debería permitir. No sé cuánto se recaudará con el tema del 112, entiendo que no demasiado, pero lo que me pregunto con curiosidad es cómo se va a hacer la lectura de esos resultados, quién va a tener “la culpa”, porque seguro que eso va a pasar.

Seguramente algunos como yo seremos señalados por no incentivarlo, pero es que no pienso mover un dedo por algo en lo que no creo, aunque repito, me parece perfecto que haya quien lo intente. Pero es que todo es hacer cualquier cosa menos sentarnos los que formamos este club, hablar las cosas desde la humildad, y aunando una posición. Porque eso igual resta protagonismo, y ya no es tan bonito.