Lim es el problema pero el Valencia no puede ser el daño colateral

Cuando el Valencia es el que paga los platos rotos a causa de Lim, nos tenemos que parar a pensar, que es algo que no hacemos de ninguna de las maneras por más que nadie me quiera convencer de lo contrario. Que faena tiene y no lo van a conseguir, pero básicamente porque los hechos son muy tozudos en este sentido. Cuando se insta a un bloqueo institucional “a Lim”, no tengo por menos que llevarme las manos a la cabeza.

Porque a Lim no le dan ni le quitan nada, se lo dan o se lo quitan al Valencia, y esa diferencia, que no es sutil sino más bien sustancial, no se ve porque se quiere ver, y eso hace que a uno le entren dudas existenciales sobre las motivaciones que se tienen para según qué cosas. Incluso te hace reflexionar, porque tú mismo entiendes que insistir mucho en algo, aunque tengas claro que puedes llevar razón, hace que el entorno te mire y te diga lo mismo, “¿qué intereses tienes?”.

Como tampoco me voy a poner a convencer a nadie de nada, que somos ya todos muy mayores para estas cosas, sólo diré que el Valencia no puede ser el que asuma las consecuencias de todo y que cargue con los muertos de una guerra en la que nada tiene que ver. Estamos jugando con el futuro, todos, no sólo Lim, y es algo que no queremos ver porque privamos nuestro papel de redentores, o de palleters futboleros del siglo XXI sobre la evidencia, y eso no es bueno, nada bueno, aunque se haga todos los días con una cotidianidad pasmosa.

Esto es un asunto de dinero, de mucho dinero, y eso no puede caer sobre nuestras espaldas, porque estamos liquidados. Pero sí podemos responsabilizarnos de que esto no sea un solar a nivel social cuando Meriton sea historia pasada, porque desde lo que quede tendremos que crecer, y cuando más pequeños nos hagamos, más duro será para todos nosotros.