La dirección deportiva del Valencia

Si la dirección deportiva del Valencia tiene poca gente mal, y si ficha gente, también mal. No tengo la menor intención de ponerme a defender a nadie, porque no es mi trabajo en absoluto, y lo que pienso sobre muchas cosas se lo he dicho a Miguel Ángel Corona, y entre nosotros queda. El club ha fichado a Carmelo del Pozo para ser el secretario técnico, esa doble figura que se ha puesto de moda en el mundo del fútbol, junto a la del director deportivo.

Su misión es la viajar mucho, ver fútbol de todas las categorías en todos los sitios posibles, y tener controlados, de primera mano, a la mayor cantidad de jugadores que seamos capaces de almacenar. Insisto en que no voy a entrar a valorar a los profesionales, porque diga lo que diga, va a ser tomado de la forma que cada uno quiera, pero sin embargo haré una reflexión sobre algo que me llama poderosamente la atención.

Durante muchos meses hemos criticado de forma enérgica, y entiendo que con razón (aunque con falta de datos, dicho sea todo de paso), que la dirección deportiva del Valencia era floja, que no tenía mucha gente, que no podía ser que no no hubiera mucho más personal. Eso de que “no hay nadie” no es así, pero vamos, repito de nuevo que nada más lejos de mi intención que convencer a nadie de nada, y mucho más cuando no lo conseguía ni con argumentos de peso.

Estando en el punto en el que estamos, sólo queda por ver el trabajo que hacen Corona y su equipo, y valorarlo, primero cuando se cierre el mercado, que será una cosa, y segundo cuando los resultados vayan diciendo si está todo bien o volvemos a ser un desastre. En cualquier caso, para determinadas corrientes de opinión, el win win de manual siempre está a la vuelta de la esquina.