Los pasos del Nuevo Mestalla
El verano no puede ser una excusa y hay que moverse rápido en todos los sentidos, porque esto ya debería estar en marcha
El Nuevo Mestalla será el campo del Valencia, aunque es obvio que esto no le está gustando a mucha gente, que no se ha tapado mucho estos meses, pero que ahora ya es algo exagerado. Todo parte, primero, de pretender que se confunda a Meriton con el Valencia, que es algo que ha venido muy bien para determinadas cosas, pero que tenía un recorrido muy claro, que por cierto, se terminó hace tiempo. Segundo, y dentro de ese argumentario, algunos lo apuntamos muchos meses antes de las elecciones autonómicas y municipales, pero sin demasiado éxito.
No sé los votos que quitó todo esto, no soy experto ni he hecho un estadio, pero viendo el resultado de los comicios, parece obvio que no les dio demasiados a los que defendieron las tesis del enfrentamiento. Ahora, cada vez con más fuerza y desde más sitios, se ve de forma clara que, para que Lim acelere el proceso de venta, lo mejor es que el Nuevo Mestalla esté en marcha, y el actual, con sus parcelas y 90.000 metros de suelo pasable, vendido. Primero porque el máximo accionista será más proclive, y segundo, porque los interesados verán algo realmente positivo en gastarse un buen puñado de millones de euros.
Porque si seguimos pensando que aquí va a venir un mirlo blanco para hacernos campeones de las Champions porque es su sueño desde pequeño, eso querrá decir que aún no nos hemos pegado los suficientes batacazos, y que nos quedan una buena cantidad de ellos todavía. El convenio se va a firmar en breve, el Valencia sacará el asunto de los juzgados, y las máquinas volverá a su sitio. Lo que debía haber pasado hace ya muchos meses, pero algunos vieron que no les podía dar rédito electoral.