Rubén Baraja demuestra que entiende a este Valencia
No sé cómo acabará, pero si sé que nadie en el mundo del fútbol trabajaría más y mejor por este club, ni lo haría con tanto sentimiento

Rubén Baraja es el Valencia de muchas formas y maneras. En la semana en la que algunos le han cuestionado de forma pública (que luego serán los que se suban al carro los primeros si todo acaba bien), en la que el club filtra que Bordalás se ha ofrecido, que no es verdad, para de alguna forma ratificarlo, en la que nos jugábamos el seguir teniendo esperanza o enterrarlo todo de forma casi definitiva, el más tranquilo ha sido él, como siempre, una vez más.
"Vamos a por ellos". El domingo empezó en mi móvil así, y cuando eso pasa, no tienes más remedio que venirte tú también arriba. Porque puedo asegurar que nadie está más confiado en su equipo que Rubén, de puertas para dentro y para fuera, y eso transmite una calma y una serenidad a los jugadores que se debe poner en valor. Porque ahora mismo eso cuanta tanto o más como la calidad, que no es tan baja como indica la tabla, pero que está mermada por la confianza. Por la falta de ella.
No sé si Baraja será el entrenador que nos salve o no, ni si seguirá el año que viene o traerán a otro de Mendes o un amigo de Lim. ¿Pero sabéis qué? Que a él eso no le importa para nada en absoluto, porque está centrado sólo en ganar el siguiente partido y dejar a su equipo, porque el Valencia es su equipo, en el lugar que le corresponde. Está honrando el escudo como siempre, como pocos, y además puedo presumir de ser su amigo. El Pipo somos todos, no lo olvidemos.