El papel de cada uno en la Junta de Accionistas del Valencia

¿Quién debe representar al pequeño accionista en la junta del Valencia? La pregunta tiene su miga, y entiendo que me puedo meter un lío más por hacerla en voz alta, aunque nada más lejos de mi intención, porque como digo muchas veces, estoy ya mayor para guerras que sólo quieren los jóvenes. Parto de una frase mía mas vieja que andar, y es que desde los 90 pienso que la mayor cantidad de tiempo perdido en mi vida ha sido en las juntas de accionistas del Valencia, donde todo el mundo quería hablar, porque le asistía su derecho, pero donde la inmensa mayoría de intervenciones eran realmente prescindibles.

Y lo digo con todo el respeto del mundo, que no pretendo faltar a nadie, aunque las cosas no dejan de ser así. Por no entrar en aquellos que cada año, de forma inmisericorde, repetían lo mismo, siempre lo mismo. Ahora todo es distinto, y a quien le digas que esas juntas de los tiempos de Paco Roig podían meter 2000 personas con derecho a voz y voto en la Fuente de San Luis, igual no se lo creen, pero así es. De nuevo serán muy pocos, pero muy pocos, y algunos estarán por delegación de acciones, un instrumento que viene recogido y que es perfectamente válido.

Pero como ya pasó el año anterior, y creo que se vivieron momentos que no tocaban (y no digo que no se tuviera razón, que eso es otra cosa), creo que los periodistas estamos para contar las cosas que pasan y no para ser protagonistas de las mismas. Más allá de la linea editorial que se tenga, que eso ya cada cuál sabrá. Pero entiendo que no estamos para eso, porque somos otra cosa. Y tampoco voy a ser absurdo, que van dos a la junta. A Paco Polit sólo se le pueden dar las gracias por pegarse una paliza anual y traernos todo lo que pasa dentro. Y no busco líos con Héctor Gómez, que es el otro. Sólo digo que nosotros deberíamos ser otra cosa, que casi seguro, como siempre, que estaré equivocado.