Peter Lim no vende el Valencia... oficialmente

Peter Lim vende el Valencia, pero lo hace a un precio determinado. Es decir, que haya cola en las oficinas del club para comprar sus acciones (no llega a tanto, pero hay muchos), es una cosa. Y otra muy distinta que esas ofertas que se supone que llegan sean del agrado del máximo accionista, o como poco, estén cerca de cubrir sus expectativas para deshacerse de la entidad. Y en este tema todo el mundo tiene razón, porque cada cual hace sus números, lo pone todo blanco sobre negro, y unos ofrecen hasta donde las llega para obtener margen de beneficio, y otro quiere no perder nada de su patrimonio.

Y entiendo que esto nos debe cabrear mucho, o al menos a algunos, porque es cuando te das cuenta de que esta pelea, el valencianista de a pie, no pasa de meros espectadores. Es una partida de ajedrez de la que sólo vamos a saber el resultado, ni siquiera cómo se juega, porque está muy por encima de nosotros. Y esto es algo jodido, sin duda, pero como dijo Anil Murthy, es lo que hay por nuestra culpa. Vendimos nuestras acciones, dejamos que el club tuviera un dueño, y a partir de ese momento, nuestra alma es del diablo, nos guste o no.

Si Lim no vende es porque nadie le pone encima de la mesa lo que pide. Y el que ofrece hace cuentas, porque hay que acabar el Nuevo Mestalla, que con CVC es menos problema, porque tenemos una deuda importante, en gran parte asociada a las hipotecas de Mestalla, y un estadio, ese mismo, que hay que derribar, y limpiar el solar, para que se pueda hacer negocio con él. La solución de Meriton es la más lógica en este sentido, es decir, poner en valor la sociedad, terminando el futuro estadio, porque eso hará de gancho por un lado, y por otro, hará más "amables" los números.