Lo que debe hacer el Valencia con Jesús Vázquez

Con Gayà renovado y él necesitando jugar muchos minutos en los próximos años, las cosas no son nada fáciles

Toni Hernández | 18 NOV. 2022 | 00:02
Jesús Vázquez

El futuro de Jesús Vázquez en el Valencia es delicado, por muchas cosas. Y aquí vamos a tener que hacer un ejercicio de empatía con el jugador, o no hacerlo sino queremos, pero la realidad será objetivamente la misma. La renovación de Gayà, algo deseado y aclamado por todos, tiene también sus consecuencias hacia abajo, y el primer damnificado es el canterano. Con 27 años, el de Pedreguer será titular hasta que él quiera, y eso condena a ser suplente eterno al que se quede.

Con 19 añitos, Jesús necesita jugar para poder terminar de formarse, y eso, en el Valencia, todos tenemos claro que no se va a dar salvo que haya alguna desgracia, que nadie la quiere. Si el club es egoísta, que en su derecho estaría, el chico se queda aquí porque tiene relación contractual vigente. Si el jugador es igualmente egoísta, en tiene el mismo derecho, está claro que quiere buscar una solución… que pasa sin remisión por una salida.

¿Cómo hacerlo? Siempre es complejo, pero Vázquez debe estar en enero en otro sitio, jugando, y con la hoja de ruta clara más allá del 30 de junio. Y luego tenemos a Lato como tercer elemento de la ecuación, así como el reparto de roles. Gayà es el titular, siempre, Toni es un comodín para Gattuso, y lo tiene en estima, aunque su contrato termina el 30 de junio y no está claro que vaya a renovar. Y Jesús tiene todo el futuro por delante, mucho caché en toda Europa, y la “garantía” de que aquí no tendrá esos minutos anda persiguiendo.

Lo del Inter no es un problema, y no lo ha buscado su agente por cierto, y es algo que se tiene que valorar con mucha calma, porque puede ser bueno para todos, al menos en el corto y medio plazo. Aunque aquí, la clave, es intentar asegurar que en largo no nos vamos a quedar desprotegidos. Vamos a ver cómo termina todo, pero que se tenga mucha calma, que aquí cada uno va a pelear lo suyo, y es lícito.