Gattuso mejora la sangría defensiva pero no es suficiente

El Valencia es un equipo eminentemente ofensivo, la idea de Gattuso es la de defender siempre con la posesión y el balón pero ello conlleva muchos riesgos. Los errores y las pérdidas son penalizadas por los contrarios y por ello las líneas deben guardar mucha atención para no romperse, los partidos locos no le van bien a este Valencia. El equipo ha encajado 15 goles en 14 partidos, demasiados si lo que se quiere es optar a Europa. Sin embargo el Valencia actual ha puesto algo de freno a la sangría de goles en contra de anteriores campañas y mejora sus datos.

En las dos últimas temporadas el Valencia encajó 21 goles en los primeros 14 encuentros, mientras que en 2019-20 el equipo entrenado por Celades sumaba 20 goles en contra. Para encontrar números mejores que los de Gattuso en este aspecto hay que remontarse a la 2018-19, con Marcelino al frente. En la temporada del centenario al Valencia le costaba ganar pero se mantenía con una decorosa cifra de 11 goles recibidos en 14 partidos.

Ahora el reto tras el Mundial es el de alcanzar mayor solidez y sumar más partidos con la portería a cero, es un trabajo de todas las líneas pero es positivo que al menos se estén mejorando las cifras de anteriores años.