No todos merecen llevar la camiseta del Valencia
No tengo nada personal en contra de nadie, ya soy muy mayor para estas cosas, y además, algunos tampoco necesitan que lo haya
Cualquiera no puede vestir la camiseta del Valencia. Lo he dicho siempre, y desde hace unos años, me he radicalizado en esa postura mucho más. Aquí todo el mundo tiene derecho a hacer lo que entienda oportuno, a jugar donde quiera, a firmar por el club que le dé la gana. Jamás me meteré con eso, porque olvidamos demasiadas veces que esto es un trabajo para los profesionales, y una pasión para todos los demás, y sin ese matiz bien claro, las confusiones y los excesos están servidor en bandeja, y sin ninguna necesidad.
En estos tiempos que andamos buscando cómo debe ser una leyenda del Valencia, lo que resulta más evidente es que, por encima del rendimiento deportivo, está el respetar siempre al club, cuando estás y cuando no estás. Y eso significa muchas cosas, posiblemente no las mismas para todos, pero es evidente que hay determinadas líneas rojas que, si pasas, no puedes decir después que quieres a la entidad. Y Mestalla es muy sabio, siempre, e igual que no deja de cantar "Peter vete ya" en el minuto 19, observa el comportamiento de todo el que pasa por aquí.
El final del partido contra el Barcelona deja a todo el mundo en su sitio, sin que haga falta ninguna explicación más. Se nos tachó a algunos de montar una campaña personal contra Ferran Torres el día que se fue, y todo a cuenta de atizar a la propiedad, que tiene muchos más "méritos" contraídos para ello, y no se quiso ver la esencia de todo, porque pegar palos estaba por encima de todo. El tiempo, los hechos y el carácter real de las personas, ponen todo en su sitio exacto, sin que nadie tenga que mover un solo dedo. Que luego nadie me venga con que soy o quiero volver porque es mi casa, porque eso te lo tienes que ganar.