Que el Valencia sea un desastre para que no nos venga mal

El Valencia de Anil Murthy, porque así lo quiso y permitió Peter Lim, fue un desastre y nos hice pasa más vergüenza que en la vida michas veces, por muchas cosas. Eso es in cuestionable, innegable, y le tenemos que agradecer a este medio, y a su director, Rafa Marín, que sacaran unos audios que le dieron una puntilla que no tendría que haber hecho falta, pero que parece que era algo necesario para cerrar una página muy oscura de la historia de este club.

Igual que existió “la era Murthy” por obra y gracia de Lim, ahora existe un Valencia totalmente distinto, pero totalmente. Que no se quiera ver porque el relato es el relato y del burro habrá muchos que no se baje porque lo primero es tener razón es una cosa, pero que no sea así, otra muy distinta. Este club, al que le queda todavía mucho camino por recorrer, empieza a hacer las cosas como jamás debió de dejar de hacerlas, y la sensación, la insoportable sensación, es que eso no viene bien, que hubiera sido mejor estar como estábamos, que los cambios si, pero no… 

A nivel deportivo tenemos mejor equipo que el año pasado, y se ha hecho un buen mercado de fichajes teniendo en cuenta el dinero invertido. La labor de Corona ha sido puesta en tela de juicio siempre, porque ponerle a parir está de moda, como con Nico Rodríguez, que no entiendo a quién ha matado para que le tratemos, algunos, de esa forma. Gattuso, un tipo que nos lidera a todos, ha dado la cara por el manchego, que tampoco tenía necesidad, y eso tampoco ha sido relevante.

Decía Javier Gómez que nuestras cuentas están mucho mejor, que casi hemos normalizado la situación tan delicada que había respecto al Fair Play Financiero. Otra más que pasa de puntillas. Ahora la cantinela es que Lim no tiene ambición, y que por eso vienen cedidos. Porque decir que el Valencia estaba atado de pies y manos en su margen salarial y que no podía traer a nadie más en propiedad es como recular, como decir que algo va bien… y claro, eso no, por encima de nuestros principios, faltaría más.

El campo está más vivo que nunca, pero como no se puede imaginar el entorno. Hay dinero en el cajón, el de CVC, y un proyecto bueno, bueno de verdad, que nos hará tener un estadio extraordinario. Pero los intereses políticos y de otros órdenes obligan a que no, a que tengamos que ir con la cantinela del low cost, las plazas netas y el toro que mató a Manolote. ¡Que el Valencia no tiene la culpa de que la ciudad quiera ser sede del Mundial, ya está bien! ¿Sabemos cuántas empresas hay interesada en la cubierta solar del Nuevo Mestalla? Muchas, pero muchas, y de primer orden en sus sectores. Tampoco nos vale.

Peter Lim me decepcionó. Porque con la persona que hablé en persona largo y tendido hace 7 años sobre mi equipo era una, y la que ha dejado hacer durante años aquí ha sido otra. No creo que a nivel social esto se levante jamás, porque el descrédito y el desgaste han sido enormes, pero que las cosas se hagan como toca por el bien del Valencia no nos puede cabrear, ni nos puede hacer mentir. Es, repito, como si fuera mejor estar mal, ser un desastre y un meme, porque de ese modo estaría todo justificado. No se trata de tener razón, sino de que todo salga como queremos, que algunos viven en una película de la que no quieren salir.