La mejor versión de Thierry Rendall en el Valencia

Que el portugués jugara 35 partidos sin problemas físicos sería poco menos que el equivalente a un gran fichaje

Toni Hernández | 24 JUL. 2022 | 00:02
Thierry Rendall

Un gran fichaje del Valencia sería que Thierry Rendall pudiera jugar 35 partidos esta campaña y que dejará atrás para siempre los problemas físicos que muchas veces le han mercado más de la cuenta. Incluso han provocado ciertos debates maleducados y groserías, poniendo en entredicho incluso que fuera apto para el deporte profesional, que aquí, cuando nos ponemos, no miramos pelo y podemos llegar a ser muy salvajes, pero mucho.

Estamos hablando de uno de los mejores laterales derechos de la Liga, con permiso de todo el ejército de haters que sigue teniendo porque costó 12 millones de euros, que yo no hubiera pagado en ese momento, y porque lo trajo Jorge Mendes, que cuando sea un futbolista de 30 kilos nadie se acordará, como suele pasar. Ha trabajado mucho, ha sufrido más.

Ahora mismo tiene un cuerpo para poder ser luchador profesional además de futbolista, y tiene los conceptos defensivos más que asimilados, porque eso cada día es mejor en esa faceta. Y sigue teniendo potencia y calidad para irse arriba. Se está hablando muy poco de él estas semanas, porque quizá damos por sentadas una serie de cuestiones que ponemos poco en valor, pero que este chico dé su mejor versión, que si le saca es de un nivel brutal, el Valencia cuenta con un efectivo de muchísimos quilates.

Y a esa banda derecha, además, le sumas un tipo que juegue por delante de él, la mezcla tiene pinta de ser explicativa, porque Thierry Rendall con un socio con el que entenderse va a ser mucho mejor de lo que es. Me alegra todo lo bueno que le pase a cualquier jugador del Valencia, que eso vaya por delante, pero es que hay algunos por los que siento especial predilección por diferentes cuestiones, y con él portugués me pasa eso. Fuimos muy maleducados con él, y un chaval de su edad no tenía la culpa de nada. Ahora, con su fútbol, sigue callando bocas una detrás de otra.