Los políticos han agotado el Nuevo Mestalla

Los políticos han agotado el rédito que les daba sacar punta al Nuevo Mestalla. Eso es así por más que lo niegue, porque cuando te dedicas única y exclusivamente a negarte a todo, a ponerle pegas a todo, a reventarlo todo, y a poner exigencias que sabes que no se van a poder cumplir (un día hablamos de las razones por las que Lim no dejó todo esto firmado en el contrato de compra del club, que eso tiene delito), puede estirarlo en el tiempo hasta cierto punto, pero no más.

Y cuando además asoman sospechas de intereses personales en estos asuntos, igual toca empezar a taparse más que a sacar pecho, que tanto con el PSOE como Compromís igual deberían estar más pendiente se limpiar su casa que de dar lecciones de moral sobre las ajenas, algo que ha constituido su forma de vida en los últimos tiempos.

Se acusó al PP valenciano, con razón, de usar al Valencia como caladero de votos hace años. Y ahora resultas que los demás han hecho lo mismo, sin más. Pero eso se ha terminado, porque las elecciones están a la vuelta de la esquina, porque al final, en una empresa privada te puedes meter hasta donde puedes, y porque tu alternativa, si es que realmente se puede y es legal, es apretar un botón rojo que les da más miedo que hablar de sus propias vergüenzas, que ya es.

Hay 85 millones de euros de CVC y la necesidad de acabar el Nuevo Mestalla. Las palabras y las fotos oportunistas se han terminado, y ahora toca trabajar, porque se os va a ver el plumero a todos, y eso es malo para el Valencia, que nunca ha sido el fin sino la excusa, y para la sociedad valenciana, que es la que os tiene que votar, o no.