El plan deportivo de Meriton para el Valencia

Algo tiene que haber escrito, o pensado, o imaginado, porque me niego a pensar que todo es fruto de los golpes inspiración de nadie

Toni Hernández | 12 JUN. 2022 | 00:01
Lim y Mendes

El plan deportivo de Meriton es la gran incógnita que nos tiene a todos en pánico en el Valencia. Se dice que lo han pactado todo con Gattuso en Singapur, y que el nuevo entrenador sabe lo que se va a vender… y en teoría, lo que va a venir. Pero de momento sólo lo conocen ellos, los rumores están funcionando a toda pastilla, y el miedo, lógico, se ha apoderado de todos nosotros.

Porque Meriton no tiene crédito alguno para nadie, porque hace mucho tiempo que lo han gastado todo, porque no nos creemos nada de lo que nos puedan decir… y porque encima es que no nos cuentan nada, lo que aumenta, al menos en mi caso, la ansiedad. Hace ya muchos días que Anil Murthy fue cesado, que Sean Bai volvió de ver al jefe, que Gattuso está cerrado y que Bordalás está fuera, pero mientras nos vamos adentrando en junio, no pasa nada de nada, ni bueno ni malo.

Damos por hecho que Guedes va a ser vendido, parece que a la Roma, lo mismo que Soler, cuyo destino parece que puede ser algún equipo español, Barcelona o Atlético de Madrid. Gayà quieren que siga el mismo camino, pero el capitán se resiste, y bien que hace si es lo que le dice su corazón. Cillessen deshoja la margarita holandesa y todo apunta a que Diakhaby es el siguiente de la lista, en la que también aparece, pero es un problema gigante, Maxi Gómez.

Pero todo esto son suposiciones, rumores, dimes y diretes, porque nadie sale a dar la cara, a dar una mínima explicación, y eso el valencianismo no se lo merece. La campaña de abonos, de la que vamos a hablar, será un momento clave en todo este proceso, no por los que vayan a renovar o no, sino por el mensaje del club y quién sale a explicar, que es otro marrón de mucho cuidado y ya no se tiene al inconsciente de Murthy para aparecer con el lanzallamas encendido.

No sé qué quiere hacer Meriton, igual ni ellos mismos lo terminan de tener claro, pero aunque sólo seamos sus clientes, hasta en la más humilde tienda se dan explicaciones de los productos a quienes van a comprarlos de forma habitual.