La solución al Valencia es que alguien lo compre

Nunca hablo del aficionado, ni la tontuna del "ponlos tú", pero si no tenemos claro que esto va de inversores, tenemos otro problema más

Toni Hernández | 01 JUN. 2022 | 00:02
Andrea Radrizzani

Nos podemos poner como queramos, pero la solución al Valencia es comprar a Peter Lim. Hace unos días discutía con alguien por las redes, algo que me propongo siempre no hacer pero en lo que siempre termino cayendo. Todo a cuenta de ser o no pro Meriton. Y yo le decía algo como que el hecho de que no estemos de acuerdo en las soluciones no significa que no tengamos claro el problema.

Leo alternativas y posibles arreglos puente para el Valencia actual, pero si de verdad buscamos algo que sea global, tenemos que ir al origen, y ese es Peter Lim y sus acciones, que están por encima del 90%. Primero se debe conseguir que tenga voluntad de vender, algo que hasta ahora no se ha conseguido, y que sigue sin conseguirse  fecha de hoy, pero que es el paso previo. Y luego, lógicamente, comprarle esos títulos.

En ese instante es cuando debe aflorar el empresariado, el tejido industrial, el capital, porque el aficionado de a pie no puede, ni debe, meterse en una lucha que no puede ganar. Se puede, y se debe, apretar las tuercas en el ámbito social al máximo, siempre sin manchar la imagen del club, pero a la hora de cambiar de verdad las tornas, se ha de contar con el dinero de quien lo tiene. Y es muy posible que sea de fuera, con inversores o fondos que no vengan ni de Valencia ni de España, entre otras cosas porque aquí puede haber ganas, pero no tiene pinta de haber mucho dinero, que es lo que hace falta para completar tofo lo que estamos diciendo.

Hay muchos valencianos buscando dinero por todas partes, gente que quiera comprar el club, y desde hace mucho tiempo, incluso habiendo llevado ya ofertas al máximo accionista, pero de momento sin suerte. Porque esa es la solución, la de verdad, la total, aunque luego eso generará otros debates, como quién compra, qué quiere, si será “otro Lim” y demás. Los pasos previos, repito, se han dado, pero sin los definitivos, no nos engañemos, habrán servido para poco, y toca darlos, nos guste o no.