Que no haya más lesionados en Valencia: lo siento, me conformo

Ya no se trata de conformismo, sino de mero sentido común, porque llegados a este punto, no se puede hacer mucho más

Toni Hernández | 16 ABR. 2022 | 00:02
Gabriel Paulista

Si el Valencia no tiene más lesionados de aquí a la final de Copa del Rey, daré como buenos estos dos encuentros que nos quedan hasta ese día… sea cual sea el resultado. ¿Conformista? Realista hasta un punto que ni yo mismo soy capaz de reconocer, pero que es algo que tenemos ahí, que no podemos ocultar ni tapar, y que es a lo que nos hemos visto abocados por las circunstancias de uno de los años más raros que recuerdo en este club. No es tiempo de analizar nada, porque ahora mismo no va a aportar mejoría, y tengo cristalino que José Bordalás sabe cómo va a jugar en La Cartuja, y con quién, desde el día que eliminamos al Athletic de Bilbao en Mestalla.

Desde ese momento, y aunque hemos ganado varios partidos y no hemos perdido ninguno, ya no ha habido otra cosa que la final. La séptima plaza la tenemos a 5 puntos, como desde hace varias semanas, y ahora vienen dos encuentros que no veo que vayamos a ganar… al menos con facilidad. Lo normal, y lo normal y el fútbol no son conceptos que casen especialmente bien, es que no saquemos los 6 puntos, y eso nos haría llegar a La Cartuja con escasas opciones de llegar a Europa por la vía de la Liga. Estoy siendo crudo y sincero conmigo mismo, no pesimista, que es otra cosa muy distinta. Si la decisión es jugarse todo a la carta de la Copa, sin estar de acuerdo, y en este momento, hagámoslo bien. Vamos a guardar a la gente que sea vital, al que este resfriado a la grada, y salgamos con todo lo demás.

Repito, no me gusta ni me siento cómodo con esta forma de pensar, pero llegados a este momento, lo que no tendría ninguna lógica sería actuar de otra forma distinta. Si para el día 23 hay un once titular en la cabeza del entrenador, que estén todos disponibles y a tope, no hay más. Ya lo sé trata de correr o no correr riesgos, sino de aplicar al máximo el sentido común en este contexto. Repito, no me gusta, entiendo que a nadie, pero hagamos las cosas fáciles y no las compliquemos más, que a Sevilla hay que ir con el mayor optimismo posible, no hay otra alternativa/