El Valencia ofrece su peor cara en Vallecas... aunque no pierde

El Rayo Vallecano - Valencia era la última ocasión real de los de Bordalás de meterse en la lucha por la Conference League. Nadie ha dicho que se esté contento con esto, pero es mejor que no tener nada, tampoco hay que ser muy listo para entenderlo. El alicantino se dejaba el tema de los 3 centrales y optaba por un 4-3-2 con cara de 4-5-1, pero dejando a Duro en una banda y a Guedes en punta. Los locales entraron mucho mejor al partido, el equipo no creaba, y además, los madrileños tenían ocasiones de peligro.

La mejor de la primera mitad fue para Isi, que tras mandar el balón a la barrera en una, volvía a chutar tras el rechace y Mamardashvili hacía una parada enorme. En el 33, Sergi Guardiola mandaba el balón al larguero con un centro-chut que se iba envenenando. Hasta el descanso, mucho barro y poco juego, y con la sensación de que Hugo Duro es 9 y Guedes segunda punta, y no al revés. Lo mejor era irse a los vestuarios y pensar en lo que se debía cambiar.

El arranque de la segunda veía dos cambios. Ilaix y Duro se quedaban en el vestuario, dando paso a Foulquier y Marcos André. Los primeros minutos fueron muy denso, sin apenas nada, y con un Valencia que no tenía ningún tipo de claridad en cuanto pasaba el centro del campo. Aunque eso sí, la calidad es la calidad, y en la única buena de Guedes, encontraba un balón dentro del área, llegaba Soler desde atrás, y con un remate plagada de fortuna, lograba el 0-1 en el 56. Lo mejor que le podía pasar al Valencia. El partido cayó en bastantes minutos de nada otra vez.

En el 72, Musah se iba lesionado, y entraba por él Racic. En el 74, de nuevo Isi hacía una gran jugada, con una gran disparo... y otra gran parada de Mamar a dos manos. En el 80, otro cambio, saliendo Guedes y entrando Jesús Vázquez. Marcos André pasaba a la posición de delantero centro. En el 81, gran jugada del Valencia por la derecha, Racic se quedaba solo delante del portero, pero su remate se iba fuera. Un minuto después, André perdía un balón absurdo, contra del Rayo, y Guardiola marcaba un golazo imparable. Paulista dejaba su sito a Cömert en el 84. En el 92, de nuevo Mamardashvili le hacía otra parada enorme a Isi y dejaba al Valencia en el partido. De ahí y hasta el final, sólo una parada más de Mamar jugándose el tipo. Poco Valencia, demasiado poco.