"Lo que le pase al Valencia lo tenemos merecido": calma y respeto

Estamos normalizando el hecho de demonizar al que no piensa como nosotros, y eso es un camino muy peligroso y muy injusto

Toni Hernández | 05 ABR. 2022 | 00:02
Lim go home

Todo lo que le pasa al Valencia lo tenemos bien merecido”. Leí esta frase, o muy similares, demasiadas veces en la noche del domingo, después del partido contra el Cádiz. Todo a cuenta de la concentración que se convocó en la puerta de Mestalla al terminar el partido. Era contra Meriton, y había en torno a 250 personas. Calificar eso de éxito o de fracaso es muy relativo, primero porque hay que partir de un respeto, y segundo, porque cualquier valencianista que quiera expresar su opinión está en su libre derecho a hacerlo. Y si es en su casa, Mestalla, o fuera, desde luego que mucho más. Ahora bien, igual que está el derecho y el respeto en una dirección, debe estarlo en la otra.

Que cada vez haya mensajes más subidos de tono si no se sacan los papeles amarillos del minuto 19, o que directamente se insulte a todos aquellos que no se quedaron a la puerta de la Avenida Sucia (que vista la gente que fue, casi equivale a menospreciar a toda la afición del Valencia), hay un trecho que jamás se debería andar, porque no puede ser que el que no piensa como yo sea un mierda. Así de claro y así de gráfico, porque no se puede tolerar este tipo de comportamiento. No voy a taparme respecto a dos cosas. La primera es que he considerado a Libertad VCF lo mejor, a nivel social, que le ha pasado al entorno del Valencia en mucho tiempo.

Y la segunda es que me han decepcionado, porque creo que han perdido una gran oportunidad de ser bandera de todos y no sólo de unos pocos. Sólo es mi punto de vista, no tiene que ser la verdad absoluta, y la hago pública desde el más absoluto respeto a la plataforma, a lo que hacen y a las horas que le echan, que sé que son muchas y de forma desinteresada. Pero por no acudir a una concentración o no levantar un cartel amarillo no se es menos valencianista, ni más por hacerlo. Y desde luego, nadie que sea y sienta del Valencia se merece nada malo que le pasa, siempre hablando a nivel de club. Si perdemos ese norte social entramos en una espiral muy peligrosa. Y mucho me temo que estamos de lleno en esa fase.