El traspaso de Gonçalo Guedes este verano, o no

Dar algo por sentado puede ser peligroso, porque tal y como están las cosas, ningún contexto es descartable... a día d hoy

Toni Hernández | 30 MAR. 2022 | 00:04
Gonçalo Guedes

¿El Valencia va a traspasar a Gonçalo Guedes este verano? Como digo muchas veces, si ahora mismo hiciéramos una encuesta de estas malignas que se ven en las redes sociales, sino el 100%, ahí andaríamos con todos aquellos que dicen que así será. La política de Meriton de estos últimos años no invita a pensar otra cosa, el club debe equilibrar las cuentas (a no ser que el máximo accionista lleva a a cabo una ampliación de capital de mucho más dinero que indica la de capitalizar su deuda) y se da por sentado que Peter Lim y Jorge Mendes ya han preparado la rampa de salida para el jugador portugués.

¿Tenemos algún argumento de peso y real que nos haga recapacitar sobre esto? Quien suscribe no, aunque también es cierto que debemos analizar muchos otros factores que son importantes, y las distintas derivadas que aún se puede producir en un mercado que aún está a meses de abrir, y que ya registra una actividad, o al menos así parece, que esto parece la última semana de agosto. Con Guedes hay que ver varias cosas, y es lo que nos proponemos tocar en este artículo, con el que por cierto, no se pretende convencer a nadie de nada. Acaba contrato en 2024, lo que es un factor importante por su valor de mercado. Si alguien pone encima de la mesa 60 millones de euros por él, mucho me temo que el Valencia haría mal… si no lo vendiera. Eso, además, nunca tendría que ser el problema, porque si tienes los relevos listos, la entrada de dinero sólo debe facilitar que estén en Paterna cuanto antes.

Si Soler y Gayà renuevan, será más complicado que siga, aunque si uno de ellos no lo hace y es vendido, sus opciones de seguir aumentan. Si Maxi Gómez es vendido por esos 20 millones de euros que se pretenden por él, y también se libera al club e la ficha de Cillessen, hay más espacio para vivir menos ahogado, aunque aún habría que hacer alguna operación más. Aunque en abril podemos salir de todas las dudas y ver si realmente sigue vigente el Fair Play Financiero, o ya de forma definitiva, el fútbol europeo se tira la manta a la cabeza y vuelve al pasado, con todo lo que eso conlleva a todos los niveles, especialmente los relaciones con la desigualdad en tres ricos y pobres.