El entorno del Valencia, la opinión pública y una guerra que deja muchas sombras
Simplificar las cosas para generalizarlas y poder sacar tajada dividiendo... lo que hacen algunos pero sólo es favorable a Meriton

El entorno del Valencia no es fácil, la opinión pública estamos divididos en bandos y lo trasladamos siempre al aficionado, y eso termina provocando guerras que van mucho más allá del simple y fácil “o con Lim o contra Lim”. Pretender esto es hacer a la gente tonta, siempre buscando un beneficio, porque insisto en algo sencillo: ¿hay alguien en esta ciudad que defienda al máximo accionista? Y desde luego no cuenta el hecho de que algunas cosas se vean bien, porque lo son, o que algunas soluciones que aportan algunos grupos nos puedan parecer, a valencianistas como quien suscribe, poco menos que absurdas, al nivel de la gestión de Meriton en muchos casos.
Claro que en el entorno del Valencia hay una guerra, originada por Meriton en su inicio, pero alimentada por mucha gente deseas de recuperar el puesto de privilegio perdido frente a otros que pueden estar mejor posicionados según respecto a qué cosas. En definitiva, la historia de toda la vida, los mismos perros con distintos collares, y que nadie de piel fina se me vaya a enfadar ahora, que burradas mucho más salvajes me ha tocado escucharme a mí estos años. Y decir a cada uno lo que es no es ser de nadie, en todo caso del Valencia. Porque pensar que “De Torino a Mestalla” se representan a ellos mismos no se contradice con que Meriton debería estar fuera de aquí hace mucho tiempo.
Estar convencido de que Bordalás es el entrenador adecuado no está reñido con que Peter Lim le haya negado el refuerzo clave que necesitaba el equipo en la figura del 6. Querer que Mestalla se termine no es contrario a decir que Meriton no ha movido un dedo y se lo ha encontrado hecho, y que hay gente deseando que el estadio no se acabe porque se les acaba una fuente de generar palos a la propiedad. Que no me va a convencer nadir de la guerra que tenemos montada, de los muchos bandos e intereses que hay montados, y que al final, por desgracia y para demasiada gente, el Valencia sólo es una excusa para alcanzar sus objetivos, y no en un fin en sí mismo, que es lo que debería ser.