Si el Nuevo Mestalla no mejor al actual, cagada gigante del Valencia

Si el Nuevo Mestalla no es mucho mejor, a todos los niveles, que el actual, cambiar no tiene demasiado sentido. Ya no se trata del tema de la capacidad, que tampoco parece ser muy lógico bajas de 55.000 a 46.000, sino que el tema es, básicamente, el proyecto de crecimiento que se puede tener en la cabeza. La idea, cuando se pensó cambiar de casa, era ir a un sitio en el que cupiera más gente, que se pudiera aumentar de forma notable la cantidad de abonados y la recaudación por taquillas, y que se generara mucho más dinero, siendo un negocio diario y no sólo cada dos semanas con los partidos en casa.

En aquel momento, 2006, había lista de espera de abonados, no se tenían pases para todos, e ir a Mestalla era poco menos que una cita obligatoria cada semana. Las cifras de asistencia desde entonces hasta ahora, y no pensemos en Meriton, son las que son y pueden darnos que pensar, pero es que se trata de mejorar muchas cosas, no de conformarse con lo que hay. No diré la capacidad que debe tener nuestro estadio, pero sí entiendo que debe ser importante pensando en enganchar a mucha más gente. Ha de ser un campo cómodo para el espectador e incómodo para los rivales, con el tema de la presión ambiental que siempre hay en Mestalla.

Y tiene que ser una fábrica de billetes, porque al final, se trata de poder recaudar más para tener más poder adquisitivo y reducir distancias con los grandes de España y de Europa. Sí, la Juventus se cambió a un campo más pequeño, pero una excepción no la podemos convertir en norma, ya que la inmensa mayoría de clubes que han tomado ese camino ha sido para ampliar aforos. Nos tienen que explicar muchas más cosas sobre el Nuevo Mestalla, de eso no cabe duda. Y cuando antes lo hagan, mejor para la tranquilidad mental de todos nosotros.