Peter Lim, la deuda del Valencia con CaixaBank y no dar palos de ciego

Peter Lim puede no tener ni idea de lo que significa el Valencia, lo puede tener al borde del colapso, y hasta igual le importa un carajo (que ahí tengo más dudas, al menos empresariales), pero lo que está claro es que no es tonto. Desde diversos colectivos se ha pedido a CaixaBank, que después de la fusión con Bankia es a quien más dinero le debe el club, que presione para provocar la salida del máximo accionista. Pero la respuesta de la entidad, incluso antes de fusionarse, es que se estaba al corriente de todos los pagos, y que no había queja alguna ni motivo tampoco para tal cosa.

¿Que el Valencia pague sus préstamos en malo para alguien? Esta semana hemos asistido a la lectura de algunas informaciones que lo único que consiguen es confundir al personal y calentar el ambiente, que ya está más que ardiendo, con algo que no tiene lógica. Si el Valencia paga los préstamos que debe, que vienen en varios casos del siglo pasado, ¿alguien me puede explicar cómo es posible que el que cobra puede ejercer algún tipo de presión sobre el que abona en tiempo y forma? Partiendo de la legalidad de hacerlo de ese modo sin nada pendiente.

Entiendo el buscar todas las maneras de echar a Lim de aquí. Es lo que su gestión, al menos parte de ella, ha provocado a nivel social. Pero intentar meter el cuchicllo donde no hay nada que rascar, y mover el avispero que ya está tenso a más no poder, no es la fórmula más adecuada. Porque lo estaremos haciendo mal, y no se conseguirá nada. Tener malos gestores es un problema y un drama, pero que cumplan con las obligaciones de pago de la sociedad,en ningún caso puede ser algo que vaya en nuestra contra.