Sin victorias en el Nuevo Mirandilla desde 2005

El Valencia visitará Cádiz por primera vez tras el cambio de nombre del estadio, en el antiguo Carranza vivió momentos de todo tipo

Jose Hernández | 01 OCT. 2021 | 08:00
Nuevo Mirandilla

El Valencia visitará mañana el renombrado Nuevo Mirandilla de Cádiz con la esperanza de volver a la senda del triunfo. El equipo de Bordalás tendrá que seguir haciendo frente a las importantes bajas y tendrá en frente a un equipo que ha sido irregular en el comienzo de liga pero que con Álvaro Cervera siempre es peligroso. La última visita se produjo el pasado mes de abril y se saldó con derrota valencianista en un encuentro marcado por el incidente de Diakhaby con Juan Cala.

No son demasiadas las veces que los dos equipos se han enfrentado a lo largo de la historia, en lo que llevamos de siglo solo se vivieron tres duelos en la ciudad andaluza, dos en liga y otro en copa. La última victoria en el campeonato de la regularidad tuvo lugar en el año 2005, el Valencia terminó llevándose los tres puntos con un gol de Vicente, el disparo del de Benicalap fue desviado por el fuerte viento que reinaba aquella tarde.

Pero este estadio también quedará grabado en la memoria del valencianismo por un hecho negativo, ya que fue allí donde se certificó el descenso a segunda de 1986. Con un Valencia casi sentenciado tras la derrota 3-0 en el Camp Nou, Cádiz y Betis empataron su partido (un encuentro cargado de sospecha) y los de Mestalla perdieron la categoría de manera matemática. Más agradables son otras anécdotas que se produjeron en distintas visitas. Hay que remontarse a 1993 y a un partido que el Valencia ganó por cero goles a dos, uno de esos tantos fue conseguido por el brasileño Leonardo y permanece entre los más espectaculares en la historia del club..

En aquel mismo partido Gaizka Mendieta debutó en primera división, en lo que sería el inicio de una carrera exitosa en el Valencia. El Valencia regresa a un estadio que trae recuerdos de todo tipo con la necesidad de volver a ganar y calmar el nerviosismo generado tras solo sumar un punto de los últimos nueve.