El coronavirus y el Valencia
El partido ha terminado marcado por el coronavirus y la decisión del club de suspender todos los actos no deportivos de la entidad

El Valencia - Betis viene marcado por el coronavirus mucho más que por toda la necesidad que tiene el conjunto de Celades y la mala racha de resultados, que ya es decir para todo lo que lleva lloviendo desde hace algunas semanas. La decisión del club de suspender todos los actos no deportivos de la entidad ha puesto de nuevo a la propiedad en el punto de mira, aunque de nuevo caemos en contradicciones. Sin tener que tomar servidor la decisión, es posible que me parezca exagerada. Pero si la tuviera que tomar, es más que probable que hubiera hecho lo mismo y de esta forma curarme en salud para evitar males mayores, o en su defecto, que no se me pudiera achacar nada por no tomar las medidas preventivas oportunas. Lo sorna y la mofa, o el pedir que el partido se juegue a puerta cerrada cuando no depende del Valencia, eso es otra cosa.
¡El homenaje a Villa es para que no les silben!
— Drakul -- (@drakulVCF) February 28, 2020
¡La cancelación del homenaje a Villa es para tapar lo que pasa!
Al final el Coronavirus será culpa de Lim. Al tiempo.
Hasta ayer viernes, el homenaje a Villa era una maniobra del club para desviar la atención de una posible pitada al palco. Ahora que es el mismo Valencia el que lo suspende de acuerdo con el Guaje, ¿ya no hay plan genial? Tildamos al club de exagerado por sus medidas, y quizá lo sea siempre mirado desde fuera, pero de ahí a poco menos que descojonarnos porque se tomen hay un trecho bastante amplio. ¿Por qué no se dice nada de los aficionados? Porque esa función no es del Valencia, sino de las autoridades, lo mismo que decir que se juegue a puerta cerrada o no. Queremos buscarle siempre los 3 pies al gato, y es obvio que la excusa da lo mismo, y todo no se hace siempre mal ni bien, y jugar con estas cosas tampoco parece de recibo.