Rotaciones competitivas para que el Valencia esté en todos los frentes

Tener una plantilla de 22 ó 23 jugadores puede estar muy o ser un drama, y en la capacidad de gestión del entrenador está la diferencia

Toni Hernández | 23 NOV. 2019 | 08:30
Manu Vallejo

Las rotaciones en el Valencia son un drama en el que sólo supo salir bien airado Rafa Benítez, y quizá fue “simplemente” porque acabó ganando 2 ligas en 3 años, porque en caso contrario le habrían caído palos como montañas, que de hecho era la tónica muchas veces antes de algunos encuentros… que luego terminaba ganando. Recuerdo uno especialmente, en la temporada 2003/2004, en Mallorca, con un once que nos tirábamos todos las manos a la cabeza… y que terminó ganando el Valencia por 0-5, siendo el primer tanto obra del hoy director deportivo de la entidad, Jorge López. Pero volviendo al tema, y aunque Rafa y otros lo han explicado hasta la saciedad, las rotaciones son algo distinto por completo a dar descansos. Es que es justo lo contrario.

Lo que se pretende con este tipo de cosas es que haya la mayor cantidad de jugadores con minutos de verdad, rodados, que puedan entrar en cualquier momento y que la plantilla mantenga su profundidad durante todos los meses que dura el curso. Y eso está salvando de momento al Valencia, porque muchos actores que no eran ni secundarios sobre el papel, como Rubén Sobrino. Manu Vallejo, y otros que debían tener un rol más bajo, como Daniel Wass, Jaume Costa o hasta Kevin Gameiro, por no hablar del caso de Ferran Torres. Se trata en definitiva de usar todas tus piezas, sin que sea por pura necesidad, porque eso te permite ser fuerte y hasta tener lesionados… y de eso, este año, algo podemos contar.